miércoles, enero 14, 2009

Nieve

Si siempre pisase con el paso prudente y firme con el que lo he hecho estos días de nieve en las calles y aceras no tropezaría nunca, y así siempre estaría erguido y nunca caería para después sentir que tengo el deber de levantarme.

2 comentarios:

añil dijo...

Si eso fuera posible, yo no sería yo, y tú, supongo que tampoco.

(Tampoco serías tú, claro)

Un saludo.

la luz tenue dijo...

Puede, Añil, porque somos como somos, pero a mí a veces me gustaría que me asaltaran menos dudas en algunas cuestiones de la vida diaria.
Un saludo.