lunes, febrero 19, 2007

Burbuja
En el metro. Atestado. Mil olores, mil colores. Todos vamos cargados: Una bolsa de plástico en las manos, una carpeta de estudiante, una mirada en la cara. Todos vamos de camino. Las puertas se abren. En Sol se baja mucha gente.
A mi lado, en el asiento vacío, se sienta una mujer. Tiene el pelo rojo. Cruza las piernas, parece estar en otro lugar. Con parsimonia saca unas gafas de la funda, abre un libro y comienza a leerlo. No veo su título, pero sí atisbo el autor: Schopenhauer. Lee, está, es, existe.

2 comentarios:

conde-duque dijo...

Pues como estuviese leyendo sus reflexiones sobre "Las mujeres", la pobre chica iba a acabar indignada... Por ejemplo: "Lo que hace a las mujeres aptas para cuidarnos en la infancia es que ellas continúan siendo pueriles, fútiles y limitadas de inteligencia durante toda su vida". Las perlas de Schopenhauer sobre esto son infinitas.

la luz tenue dijo...

Esta también es una frase de Schopenhauer: " Los dos enemigos de la felicidad humana son el dolor y el aburrimiento".